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El docente que trabaja para desentrañar los problemas de la compresión lectora en estudiantes de educación media

Christian Arenas es profesor de castellano y actualmente realiza su doctorado en colaboración con el Equipo Binding de la Universidad de Barcelona, el cual se especializa en el estudio de las dificultades del aprendizaje de la lectura.

El informe PISA de 2009, centrado especialmente en la evaluación de la habilidad lectora, dejó en evidencia las dificultades que tienen los jóvenes chilenos de quince años a la hora de enfrentarse con exigencias reales de la lectura, y que dice relación con el desempeño de los estudiantes como lectores competentes en distintos contextos de lectura propios de la vida cotidiana.

Entre los datos alarmantes del informe se menciona que un 30% de los estudiantes chilenos no alcanza las competencias mínimas en lectura para desenvolverse en un mundo actual; y la realidad se vuelve aún menos alentadora al mencionar que el 33% de los estudiantes se encuentra en un nivel de competencia lectora justo superior al mínimo, es decir, un tercio de los estudiantes alcanza “rasguñando” los mínimos exigidos para considerar a una persona funcionalmente alfabetizada.

Con estos antecedentes, tratar de entender cómo y por qué se producen las dificultades del aprendizaje de la lectura cobra especial importancia y en esa línea trabaja Christian Arenas, profesor de Castellano y Director de Operaciones de la Conferencia Encuentros Barcelona 2016. “Intento contribuir a la consolidación de un modelo de comprensión del fenómeno de la lectura que ponga en diálogo los factores cognitivos que desencadenan el proceso de la lectura con los factores emocionales y contextuales que condicionan el hábito lector”, afirma Arenas.

Este trabajo forma parte de su tesis de doctorado, la que realiza en colaboración con el Equipo Binding de la Universidad de Barcelona, el cual se especializa en temas de aprendizaje, con especial atención en los problemas de aprendizaje de la lectura.

Sobre esto, explica que “para entender lo que ocurre con la lectura de los ojos hacia adentro me sitúo desde el modelo simple de la lectura, cuyo planteamiento reduce los procesos de comprensión de lectora en dos variables: decodificación y comprensión lingüística. Sabido es el simple view of reading no explica de forma integral el fenómeno de la comprensión, pero en un estadio inicial de acercamiento al estudio de la lectura desde un punto de vista cognitivo, es una fórmula que ayuda mucho a entender por qué y cómo se articulan el pensamiento cuando leemos”.

La primera dimensión tiene que ver con la capacidad de asociar las letras con sus sonidos correspondientes, mientras que la segunda se relaciona con la capacidad de darle sentido a las palabras, y como consecuencia, a los mensajes.

“La teoría nos indica que si la primera no se ha consolidado durante los primeros años de escolarización, la segunda se verá gravemente mermada, ya que el cerebro centra la mayoría de sus esfuerzos en asociación letra/sonido, quedando la comprensión en segundo o tercer plano, con las gravísimas consecuencias que apareja crecer en un contexto social y escolar que exige la capacidad de entender a cabalidad los textos a los que nuestros estudiantes se enfrentan”, señala.

La importancia de la comprensión lectora en la adultez

El estudio longitudinal Youth in Transition Survey (citado por un informe del Centro de Microdatos de la U. de Chile) monitoreó el progreso en la educación secundaria, universitaria y de entrada al mercado laboral cada 2 años durante 10 años de 30,000 estudiantes canadienses que fueron parte de PISA 2000. Allí se encontró que los estudiantes del grupo más avanzado de competencias lectoras en el año 2000 accedieron a la universidad con más frecuencia que aquellos que se encontraban bajo el nivel mínimo de competencias que los facultan para participar eficaz y productivamente en la sociedad.

En ese sentido, el impacto de estudios como en el que participa Christian Arenas, radica en que si se implementan planes de evaluación de las rutas cognitivas responsables de la decodificación y la comprensión lingüística, y de investigación de las circunstancias individuales que condicionan el acto lector, podría haber un gran cambio en la forma en que nos hacemos cargo de la comprensión lectora como sociedad.

“Las comparaciones son siempre odiosas, pero cuando las cosas se hace bien, vale la pena hacer mención de ellas: el 30% de los estudiantes finlandeses pasan por aulas de educación especial, es decir, si se identifican dificultades de aprendizaje de la lectura o de cálculo, por ejemplo, por mínimo que este sea, el sistema educativo se hace cargo de la nivelación.

Finalmente, el Director de Operaciones de Encuentros Barcelona 2016 manifiesta que “creo que si se implanta un modelo de evaluación y entrenamiento de las rutas mentales asociadas a la lectura que actúe en paralelo con los planes de promoción de la lectura que ya existen, podríamos ofrecer a los estudiantes mejores oportunidades de progreso como ciudadano y persona, porque lamentablemente está comprobadísimo que los estudiantes que no comprenden lo que leen tienen su futuro laboral y su estabilidad económica gravemente hipotecados”.

Por Daniela Abarca González